En términos generales, el análisis de datos consiste en extraer conclusiones útiles de los datos. Para ello, se utilizan diversas técnicas para reestructurar, organizar y presentar los datos, de modo que las relaciones y dependencias de los datos se hagan visibles y los resultados puedan utilizarse como base para la optimización de la producción.
Por lo tanto, el análisis de datos en sí mismo puede clasificarse como un método o tecnología específica en el contexto de la mejora de los sistemas de producción. La seguridad de los datos es la máxima prioridad.